jueves, 11 de junio de 2009

Reseña de la clase de Mónica Wons en el CID Bahía Blanca

Juanito y la problemática del falo

El 5 de junio Mónica Wons – Docente designada por el Comité de Iniciativa- comienza la clase planteando que el síntoma de Juanito (la fobia) surge como respuesta a la falla de la intervención paterna; haciendose necesario para entender la Lógica del caso la introducción del concepto de Significante fundamental, aquel que ordena la Lógica Significante. Si Freud apiunta al padre Imaginario Lacan se dirije al padre simbólico, entendiendo la cura como construcción de la metáfora paterna en forma desviada y no plena, lo que permite anudar el agente de la castración ausente.

A los 3 ½ años Juanito se pregunta dónde está el falo. Pregunta sí la madre tiene pene, responde en forma afirmativa. Tiempo del comienzo de la fobia; él es el objeto que completa imaginariamente aquello que la madre desea, encontrándose en un tiempo imaginario, dual. Se convierte en apéndice de la madre; va a todos lados con ella. Un dato que no es menor: el padre cuando visita a su propia madre no va con su esposa, sino con su hijo.

Juanito también tendrá un apéndice: a partir de la práctica masturbatoria en su cuerpo irrumpe un goce. Un sueño de angustia antecede la fobia: la madre se va, lo que será interpretado como angustia de separación. Con la irrupción del pene real Juanito queda ubicado en la hiancia que se produce entre un tiempo donde ya no se encuentra mas (ser el falo) y un tiempo donde nunca va a reconocerse (tener el falo). El pasaje del ser al tener implica la caída del lugar de metonimia del falo de la madre, pero para ello el padre debiera ofrecer algo para no quedar abandonado en la pura privación de la madre… la que frente al falo responde “eso es una porquería” por lo que Juanito supone que su falo es una porquería.

Al no obtener una respuesta en este tercer tiempo del Edipo, se producirá una regresión a la fase oral: el temor a ser devorado. Recordemos que la madre lacaniana es pensada como una boca de cocodrilo que se abre y se puede cerrar en cualquier momento; siendo necesario que exista al menos un palo para evitar que esa boca se cierre… si esto no es seguro se produce:

1) Angustia

2) Miedo a salir de la casa → miedo al caballo →se constituye la fobia

Para Juanito la constitución de la fobia implica una ganancia: la angustia insoportable se transforma en miedo; el caballo se encuentra en funcion simbólica y representara al padre, la madre, la hermana… El caballo permite introducir un orden simbólico: separar el adentro del afuera, ordenar el espacio. Hace carne la existencia de un límite.
Jacques Lacan presta especial atención a la fantasía de las jirafas; en ella notamos cómo la metáfora se construye en el juego de sustituciones significantes. La jirafa como papel puede arrugarse… esto implica un proceso de simbolización. De igual manera con el plomero observamos cómo se realiza el pasaje de la imagen al símbolo, ya que algo se quita y algo se reemplaza. La pérdida es condición para la recuperación en la forma de falo, de poder llevar los títulos en el bolsillo y para ello el padre debe dar muestras de que lo tiene y que puede darlo.

Con relación al padre Freud va a decir que por un lado se trata del miedo al padre –caballo- donde el odio está en juego; y la angustia ante el padre donde el amor juega su partida. Lacan dirá que lo que a Juanito angustia es la ausencia del padre, de la función paterna. La angustia por el padre nos indica el padre carente; se angustia ante el caballo pero tambien en ausencia del padre.

Con relación a la fobia de Juanito se pondrán en juego dos hipótesis y su resolución: la emergencia del pene real y la carencia paterna. La pregunta es ¿cómo se relacionan ambas?

Al no tener localizada la función, Juanito no tiene como soportar la emergencia del pene real en la medida en que no puede porque no hay un padre agente de la castración. Freud – en una visita que le realiza Juanito con su papá- ocupa el lugar del padre simbólico y aporta significantes que le permitirán a Juanito hacer metáfora – metonimia para construir un fantasma que le permita constituir su fobia.
En el caso clínico no se verifican dos condiciones para el pasaje del ser al tener:

a) La función del padre como agente de la castración

b) El padre dador (tercer tiempo del edipo) que puede restituir eso que el
sujeto sí o sí tiene que perder.

No están en juego el padre real ni el pene real del padre; por ello Juanito no puede responder a su propia irrupción de goce. La fobia se constituye pero es a su vez una solución. Lacan dirá “Entiéndanme bien. Nada en la observación nos permite pensar, en ningún momento, que se resuelvva de ninguna forma, sino con el dominio del falo materno, en la medida en que Juan ocupa su lugar, se identifica con él, ciertamente lo domina”

Sobre el cierre de la jornada, Mónica Wons abordará lo que se define como un nuevo tipo viril, y para ello hará referencia al Seminario 4 pag. 418 y siguientes donde Lacan dice que “Juanito se sitúa en determinada posición pasivizada, y cualquiera que sea la legalidad heterosexual de su objeto, no podemos considerar que agote la legitimidad de su posición”; la duda de legitimidad es planteada ab lo que se había definido previamente como metáfora desviada, por lo que juanito se acerca a determinado tipo de hombres encantadores que esperan la iniciativa del otro lado, típico de una virilidad de época.

Finalmente Mónica Wons recomienda la lectura de la Conferencia de Ginebra sobre el Síntoma, que podemos encontrar en Intervenciones y Textos II Ed Manantial, para ubicar aquello fundamental que se mantiene en la lectura de Juanito a lo largo de los años, y la nueva vuelta que Lacan da en 1975.

Horacio Wild